El proyecto para su construcción surgió a principios del siglo XX. Por aquel entonces, el Poder Legislativo de Puerto Rico se alojaba en la sede de la Diputación Provincial. Se trataba de un edificio viejo e incómodo que no daba los servicios adecuados. En los años 1908, 1916 y 1919 se asignaron fondos a propuestas de diversos Delegados. Se colocó la primera piedra simbólica de la proyectada estructura el día 17 de julio de 1925.
Interior del Capitolio de San Juan
Una amplia escalinata de mármol da acceso al edificio por el lado sur. En sus entradas principales se levantaron ocho columnas de orden corintio. Siete puertas simbólicas dan acceso al interior desde norte y sur. Hay dos terrazas al este y oeste, pisos y balaustradas de mármol, algunos con incrustaciones a colores. En el mismo centro del primer piso está instalada la urna que contiene el original de la Constitución de Puerto Rico.
El Capitolio tiene en su interior muchas estructuras recubiertas de mármol. Es el caso de las escaleras que dan acceso al segundo piso del edificio. Las puertas de acceso son de medio punto con ornamentaciones que llegan al plafón. Dieciséis columnas de mármol rosado veteado se extienden a la altura del segundo piso.
Cuatro grandes arcos ascienden del nivel del plafón en el tercer piso. Estos arcos sirven de marco a las cuatro ventanas semicirculares construidas en bronce y cristal esmerilado en la base de la cúpula. Ésta se terminó de construir en 1961. Entre las bóvedas aparecen cuatro cuadros alegóricos en forma de velas. Uno trata sobre la escena del descubrimiento de la isla; otro trata sobre el proceso de colonización; el tercero habla del Movimiento Autonomista de 1887; y finalmente el cuarto habla sobre la abolición de la esclavitud en Puerto Rico.
El edificio se puede visitar por dentro. Se realizan tours gratuitos en español e inglés, pero hay que pedir cita previa. Abren de lunes a viernes. Para llegar allí, las líneas D53, E10, T3, T5, T9 y T21 de autobús paran en la Calle del Tren.